Según la tradición católica, cada 29 de septiembre se celebra la festividad de los Arcángeles Gabriel, Miguel y Rafael. En lo que respecta al Arcángel Gabriel recordemos que un 12 de enero de 1951 el Papa Pio XII procedió a nombrarlo como patrono de las telecomunicaciones y de los trabajadores de la comunicación, más tarde un 9 de diciembre de 1972 el Papa Pablo VI lo designa también protector de los carteros y de los empleados de correo. Su figura se encuentra presente en varias religiones, pues en la Biblia aparece como mensajero de Dios, para el Judaísmo en el Antiguo Testamento y en el cristianismo en el Nuevo Testamento, además en el Islam es el que anuncia al Profeta Mahoma, su misión en este mundo, fruto de ello y bajo su influencia escribe el Corán.
El viernes 29 de Septiembre del 2023, conmemorando esta fecha, se ofició una misa en la Iglesia San Gabriel Arcángel de Villa Luro (ubicada en la Avenida Rivadavia 9625 a metros de la Avenida Lope de Vega) por el actual párroco de la misma, el Padre Pepe, quien además se encuentra en estos momentos al frente de la Capilla San Juan Pablo II, la cual se encuentra instalada en el Club Atlético Vélez Sarsfield, debajo de la tribuna popular oeste, donde los segundos martes de cada mes a las 11,00 hs. celebra una misa abierta a toda la comunidad.
La parroquia de San Gabriel Arcángel tuvo sus orígenes en el año 1993, desde sus comienzos su párroco fue Monseñor Osvaldo Santagada, en ese sentido tenemos que señalar que la misma fue construida sobre un terreno perteneciente a su familia, allí permaneció durante casi treinta años hasta su retiro.
Este año con la llegada del Padre Pepe al templo comenzaron a soplar nuevos vientos, generando con ello una gran expectativa en la barriada, de a poco se fueron acercando algunas organizaciones al lugar, entre ellas la Asamblea Barrial de Villa Luro, frente a esta situación el Padre Pepe les abrió las puertas de la parroquia, para dialogar con ellos. En estas reuniones, un día surgió una idea entre los integrantes de la Asamblea, la de plantar un Olivo como símbolo de paz, sobre la vereda de la Avenida Rivadavia, por lo tanto al llegar la festividad de San Gabriel Arcángel procedieron a plantarlo y de esa forma luego fue bendecido por el Padre Pepe.
La Asamblea Barrial de Villa Luro, desde hace muchos años está llevando adelante este tipo de actividades, ya que guiados por esa frase que dice: “Aquel que planta un árbol, siembra una esperanza”, participaron en la recuperación y puesta en valor de la plazoleta Alice Domon y Léonie Duquet, ubicada en la intersección de las calles Cajaravilla, Moreto y Medina, porque se encontraba en un total estado de olvido y abandono, allí realizaron un acto el 28 de julio del 2015 para rendirles un justo y merecido homenaje a las monjas francesas, quienes fueron víctimas del terrorismo de Estado, puesto que dieron testimonio de su fe y compromiso cristiano luchando por la defensa de los derechos humanos.
Esta situación llevó posteriormente a los organizadores de la marcha anual “Orletti-Olimpo” (en recordación de todos los compañeros desaparecidos, aquellos que estuvieron en cautiverio, en estos Centros de Detención, Tortura y Exterminio) a incorporar esta plazoleta en su recorrido. En virtud de ello y teniendo en cuenta las leyendas de los Pueblos Originarios los integrantes de la Asamblea Barrial de Villa Luro plantaron en la misma, un palo borracho, el cual refleja a manera de espejo, un auténtico estandarte de resistencia frente a la opresión, eso ocurrió el día 16 de marzo del 2018.
Al año siguiente el día 11 de mayo del 2019 se realizó un homenaje al padre Carlos Mugica, a 45 años de su crimen, fue en la parroquia de San Francisco Solano, en esa oportunidad también estuvieron presentes los integrantes de la Asamblea Barrial de Villa Luro, quienes plantaron en el sitio donde ocurrió el atentado, un olivo, el cual nos tramite con su hermoso follaje y la fresca luz de sus matices, un mensaje lleno de vida y esperanza, fruto de su acción pastoral.
El sábado 19 de febrero del 2022 se realizó por primera vez, un festival de tango en la plazoleta Alberto Castillo (Ley Nº 4599, su designación surgió por iniciativa de la Asamblea Barrial de Villa Luro) ubicada en el cruce de las Avenidas Emilio Castro y Escalada con la calle Leopardi. En esta jornada sus miembros decidieron nuevamente plantar un Olivo, en esta oportunidad como un emblema de amistad, entre los barrios de Villa Luro y Mataderos, dado que es un lugar de encuentro permanente para los vecinos, un espacio donde confluyen las comunas Nº 9 y 10 de la ciudad y donde todos los años se reúnen las comunidades cristianas, de las parroquias de San Francisco Solano (Villa Luro) y San Pío X (Mataderos) para realizar la bendición de Ramos, durante el inicio de la Semana Santa.
A lo largo de la historia los arboles fueron asociados por diferentes culturas con el poder de la naturaleza, conectándonos de esa forma desde lo material a lo espiritual, partiendo de su relación con la tierra y sus profundas raíces o de sus enormes ramas tratando de alcanzar el cielo, hasta llegar a profundas reflexiones como aquella de Mahatma Gandhi cuando expresó: “Lo mismo que un árbol tiene una sola raíz y múltiples ramas y hojas, también hay una sola religión verdadera y perfecta, pero diversificada en numerosas ramas, por intervención de los hombres”. Más allá de las interpretaciones personales sobre esta opinión y de lo que representan en el mundo los fanatismos, tanto religiosos, políticos o deportivos, todos ellos surgidos de esa incapacidad para admitir el mundo en su diversidad, propio de las personas inseguras, entendemos que existe otra forma para comprender y relacionarnos con la realidad, algo que podemos ver en las pequeñas cosas de la vida, como en estas acciones llevadas adelante por la Asamblea Barrial de Villa Luro, en su afán por sembrar vida en la Comuna 10.
Jorge Luis Santiso
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