Decenas de miles de mujeres y disidencias, se congregaron en las inmediaciones del Congreso Nacional para reclamar por igualdad de género, en contra de la multiplicidad de violencias a las que son sometidas y en rechazo al pago de la deuda con el Fondo Monetario Internacional (FMI), que se debate actualmente en Diputados.

Tras dos  años de pandemia, que dificultó movilizarse y reunirse para manifestar masivamente, mujeres y disidencias agrupadas en organizaciones sociales, políticas y también de manera autoconvocada, tomaron las calles y se acercaron al Congreso. No faltaron carteles y consignas por la aparición de Tehuel de la Torre, el varón trans de 22 años, desaparecido el 11 de marzo del 2021 y la absolución de Analía “Higui” De Jesús, la lesbiana que pasó siete  meses presa por defenderse de una violación en grupo, el 16 de octubre de 2016.

A partir de las 16 hs., la plaza del Congreso recibió a las manifestantes que, en esta ocasión y para conmemorar el Día Internacional de las Mujeres Trabajadoras, comenzó con un paro productivo y reproductivo, como sucede en otros puntos del planeta y busca visibilizar la importancia del trabajo, no remunerado, que recae mayormente en manos de la mujer.

Distintas agrupaciones y colectivos de las diferentes expresiones feministas, como #NiUnaMenos, se acercaron a los alrededores del Congreso Nacional, bajo consignas como: “Vivas, libres y desendeudadas nos queremos” y “La deuda es con nosotras y nosotres”, en referencia al debate parlamentario sobre el acuerdo con el FMI (Fondo Monetario Internacional).

Entre las pancartas y carteles improvisados podían leerse consignas que rezaban “Felíz será el día que no falte ninguna”, “Paren de matarnos” o “De camino a casa quiero ser libre no valiente”. Las mismas consignas que se expresaban en cartulinas y banderas o pañuelos, eran acompañadas por canticos y batucadas, que se escuchaban a varias cuadras de la convocatoria.

Luego, cerca de las 18 hs., se leyó un documento que lleva la firma de las diferentes organizaciones que convocaron a la concentración. En ese momento, el silencio ganó la escena para poder escuchar lo que allí se declaraba. Entre algunos de los pasajes del texto, pudo escucharse: “(...) Hoy, 8 de marzo de 2022, el movimiento feminista ha vuelto a ocupar las calles masivamente. ¡Ni la pandemia, ni el empobrecimiento, ni la violencia machista que no toleramos más pudieron evitar que volvamos a decir que el 8 de marzo es el día internacional de la huelga feminista! (...) Hoy paramos y ocupamos las calles porque acá está la fuerza colectiva que nos permite resistir y luchar por el mundo que queremos, hasta que todo sea como lo soñamos. Paramos contra la violencia machista en todos los ámbitos. Basta de femicidios, travesticidios, transfemicidios y crímenes de odio. Los agresores no son enfermos, son hijos sanos del patriarcado. Paramos contra la precarización laboral de nuestras vidas, pauperizando y feminizando aún más la pobreza en nuestro país, que hoy tiene la cifra lacerante de un 60% de las infancias pobres. ¡No podemos dejar que les expropien el futuro! (...)”.      

Finalmente, a partir de las 19 hs. las manifestantes comenzaron a desconcentrar, luego de una jornada libre de violencia y sin ningún tipo de altercados, frente a una realidad que nos sigue golpeando con la dramática cifra de un crimen de odio cada 30 horas y que, en lo que va del año, en nuestro país, ya suman un total de 55 asesinatos por motivos de género.

Redacción Línea Oeste