El 29 de agosto se conmemoró el día del árbol, fecha que fue establecida en el año 1900 por iniciativa del Dr. Estanislao Zeballos desde el Consejo Nacional de Educación.

No quisimos desde este medio dejar pasar ese día sin hacer una mención especial, ya que vivir conectados con la naturaleza y en ambientes amigables es una necesidad y un derecho del ser humano.

Los gobernantes deberían darle al tema del arbolado público la debida importancia y los ciudadanos deberíamos exigirlo ya que los árboles entre otras ventajas absorben las emisiones que generan los automóviles,   fijan el dióxido de carbono, aportan oxigeno al ambiente, reducen la contaminación auditiva, bajan las temperaturas en verano y en los barrios arbolados los inmuebles se cotizan mejor.

Lamentablemente lo que vemos a diario es la forma en que se maltratan los pocos ejemplares que logran sobrevivir en nuestra ciudad, podas brutales hechas fuera de época hacen que los árboles se sequen, contraigan  enfermedades o en el mejor de los casos, logren brotar, pero no ramificarse lo suficiente para dar la tan ansiada sombra que en verano logre mitigar en algo las altas temperaturas que se dan en la “isla de calor” que es esta ciudad en la época estival por su gran cantidad de superficies cementadas.

El desprecio por este tema también lo vemos en la falta de reposición de especies, que los porteños vemos a simple vista, sin necesidad de costosas estadísticas, observando que desde hace décadas los mismos canteros de las cuadras que habitualmente caminamos se encuentran vacíos. Según el Censo Fitosanitario realizado en el año 2011 por el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires que se realizó a través de una licitación internacional y que le costó a los porteños 1.800.000 dólares evaluó que hay 424.000 árboles y que están distribuidos en los siguientes porcentajes, el 12 por ciento está en parques y plazas, y el resto en las veredas, también llamado arbolado de alineación.

Según un detallado informe publicado por la agrupación vecinal “Juntos por el Parque Chacabuco”,organización que lucha por mantener sus espacios verdes, le están faltando a la ciudad de Buenos Aires más de un millón y medio de árboles, ya que según el censo de 2011 la relación árbol/ habitante es de 1/7 o sea hay un árbol cada siete habitantes, pero de acuerdo a los estándares recomendados por la Organización Mundial de la Salud, debería haber un árbol por cada 3 habitantes, entonces sobre una población residente  de 2.891.082 de la C.A.B.A. de acuerdo al último censo Nacional 2010, se determina una marcada deficiencia, que empeora si se considera a los habitantes no residentes que ingresan diariamente a la C.A.B.A. y considerando la cantidad de automóviles que residen en la ciudad más los que ingresan todos los días, según datos de la Subsecretaría de Transporte de CABA, la cifra de árboles que estan faltando en la Ciudad de Buenos Aires   es   muchísimo   más   alta, llegando a un millón y medio.