Se abrió el debate en la Comisión de legislación General de la Cámara de Diputados de la Nación, sobre la reforma de la Ley que regula los alquileres. En la misma estuvieron presentes representantes y asociaciones de inquilinos, martilleros, inmobiliarias y propietarios, así como funcionarios de Defensa del Consumidor.  

La apremiante situación de las personas que necesitan alquilar en la Ciudad, se profundiza año a año por la realidad económica y las condiciones contractuales que requiere el mercado inmobiliario a la hora de acceder a una vivienda. El costo de un alquiler en toda la ciudad ha subido un 52,3% solo en 2021, según el último informe del Centro de Estudios Económicos y Sociales Scalabrini Ortiz (CESO).

En su informe de marzo de 2022, el mismo CESO advierte que: los costos no contemplan otros gastos obligados: sumados al agua, la electricidad y los servicios comunes del inmueble el costo final sube a mucho más. Mientras tanto, para el mismo mes, la oferta de alquileres sufrió una caída del 32%.  

Hoy alquilar un departamento de 2 ambientes en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, acarrea un costo que va de $30.000 a $65.000 según la zona en la que se encuentre el inmueble, mientras que el Salario Mínimo Vital y Móvil se haya en los $33.000 y se proyecta que los aumentos escalonados a diciembre lo posicionen en los $47.850. A esta realidad, se le suman los $42.000 a los que trepó la canasta alimentaria (según datos del INDEC).

En este contexto, se desató el debate entre las asociaciones de inquilinos y los representantes del mercado inmobiliario. Mientras que los primeros manifiestan la necesidad de mantener la norma actual vigente desde el 1/7/2020, los martilleros, corredores y propietarios exigen cambiar la extensión de los contratos y su actualización anual.

La actual normativa, prevé que: los contratos no pueden ser menores a 3 años y el precio del alquiler se podrá actualizar sólo de forma anual (cada 12 meses) por un promedio entre inflación y salarios. Este índice lo elaborará y comunicará el Banco Central todos los meses. Ejemplo: si la inflación de julio 2021 y julio 2022 fuese del 35% y los aumentos de salarios, del mismo periodo, del 15%, el precio del alquiler tendrá una actualización del 25% para los 12 meses próximos.

Durante la última reunión en la Comisión de legislación General de la Cámara de Diputados de la Nación realizada el 19 de abril pasado , Federico Priori de Inquilinos Agrupados de Neuquén, sostuvo que: "el que debe equilibrar esa relación asimétrica entre inquilinos y propietarios es el Estado", y agregó: "acá se van a disputar dos modelos: uno tiene que ver con la intervención del Estado y otro que directamente las leyes del mercado nos gobiernen".

Por su parte, el director del programa de atención a inquilinos de la Defensoría del Pueblo de CABA, Fernando Muñoz, enfatizó que: de existir contratos más cortos, como piden las inmobiliarias, habrá "comisionistas felices e inquilinos más pobres ya que una reforma en este contexto, sería para que los inquilinos paguen más y los comisionistas hagan negocios".

En contraposición, Andrés Gariboldi, del Consejo Federal de Colegios Inmobiliarios de Argentina´, sostuvo la necesidad en la “reducción del plazo del contrato de 36 a 24 meses”. Según dijo, esto podría generar “incentivos para que haya inversiones en inmuebles para que ingresen al mercado locativo”.

Sin consenso, el debate continúa. Mientras tanto, el Frente de Todos y Juntos por el Cambio acordaron en los primeros días de abril analizar durante 30 días hábiles las reformas que se deben efectuar a la ley sancionada en 2020 ante la reducción de una oferta para alquilar, con el fin de aprobar una nueva iniciativa en la primera quincena de mayo.           

Redacción Línea Oeste.